(500) Days of Summer*
miércoles, 16 de diciembre de 2009
9:46 p.m. 1 comments (faltas tú!)


*(O Ensayo accidentalmente público sobre amor y desamor a partir de una película sobre éste).



Nota importante: Antes de comenzar, he de dejar bien clara una cosa: Esta no es una reseña. Y considero importante destacarlo para evitar crear falsas expectativas sobre lo aquí expuesto. Yo no soy crítica de cine, ni sé siquiera sobre los parámetros que éste debe tener para ser considerado bueno. Sólo soy una persona con ganas de escribir para tratar de dar forma a un cúmulo de ideas en su cabeza, pero sobre todo a un montón de sentimientos encontrados en su interior. Así que, por tanto, repito: Esta NO es una reseña. Es un escrito sobre pensamientos aleatorios sobre la vida, vista desde de los ojos de una chica a partir de "(500) Days of Summer". Habiendo dejado claro lo anterior, inicio.

“This is not a love story. This is a story about love”.


Amor. Amor es una palabra que podemos escuchar mil veces en un día y, aún así, nunca terminamos de comprenderla. ¿Qué es el amor? Existen miles de respuestas de lo más variadas a esta pregunta, que, sin embargo, de manera general podrían agruparse en 2 grandes vertientes: Los que creen que existe y los que no. Y aquí comienza el dilema de la película, pues si bien no es gran problema que no coincidamos con las demás personas sobre nuestra visión del amor, esto sí resulta complicado cuando esa visión choca con la de la persona amada. Después de una corta pero profunda discusión sobre tan complejo término, la película nos deja bien claras 4 cosas:


1. El creer (A) o no hacerlo (B), depende de la experiencia que cada persona haya tenido (o no) respecto al dichoso sentimiento.

“I've been in relationships and I don't think I've ever seen it.”


2. Entre A y B no existe una diferencia irreconciliable. No son antónimos y mucho menos verdades universales. Sólo son puntos de vista temporales distintos.

“I guess we can just agree to disagree.”


3. Pertenecer a A o a B no implica que siempre sigamos por ese camino.

“Tom was right!”


4. Podemos creer estar equivocados, y aún así, tener toda la razón.

“You weren't wrong, Tom. You were just wrong about me.”



Entonces, ¿dónde está el verdadero dilema? El dilema aparece precisamente en nuestro desconocimiento, o conocimiento distinto, sobre el concepto de 'amor', evidentemente influenciado por aquello que hemos vivido, pero también aquello que hemos visto, que hemos adoptado de películas, canciones y tarjetas. "Amar es..." nos dicen. Y así, nos enamoramos del amor, o mejor dicho, de la idea preconcebida de éste, y en vez de aventurarnos a descubrir por nosotros mismos el significado de tan profundo y complejo término, nos formamos ideales muchas veces absurdos, irreales y excesivamente fantásticos sobre lo que DEBERÍA ser, y nos pasamos la vida esperando a que esos ideales se presenten ante nosotros, dejando pasar las oportunidades que la vida nos da, sólo porque no lucen como nosotros creemos que deberían lucir.

Pero ¡oh no!, no nos conformamos sólo con eso, sino que creamos también todo un modo de vida en torno al concepto: Lo que debemos hacer cuando amamos, lo que debemos decir, lo que deberíamos sentir e incluso –patéticamente- lo que deberíamos ser. Y entonces, en ese mar de ideas adoptadas, nos llenamos de dudas, de incertidumbres que no sabemos cómo disolver. Y así, una vez más, buscamos encontrar la seguridad que no tenemos en donde sea, refugiándonos en etiquetas con las que aprendemos a vivir cómodamente, con las que nos sentimos 'seguros'. Etiquetas que, en realidad, sólo nos alejan del amor real, disfrazando sentimientos de algo que no son. Nos comportamos entonces como se supone que debería comportarse un 'novio' o 'novia' (por muy absurdos que nos resulten muchos de estos comportamientos, casi tan absurdos como la etiqueta misma). Y damos nuestro amor a la etiqueta de la otra persona, no a la persona en sí. "Te respeto, estoy contigo y te soy fiel porque eres mi novi@", en vez de "Te respeto, estoy contigo y te soy fiel porque eres tú". Y creemos, estúpidamente, que así el problema de la incertidumbre está solucionado.

“-I need to know you're not going to wake up in the morning and feel differently.
-I can't give you that. Nobody can.”


Nadie puede. Ni aun con etiquetas. La etiqueta no hará que la persona te ame por siempre, que no conozca a más personas, que no decida alejarse. Lo que sí puede hacer, el superpoder con que cuenta la etiqueta, es crear un compromiso. La gente no ama a la gente. La gente ama el compromiso. Se comprometen porque así OBLIGAN a la otra persona a respetarlos, a estar a su lado. Si nuestra persona se quisiera alejar, si quisiera irse, tendría primero que romper el compromiso que se lo impide. Repito: El COMPROMISO que se lo impide. No se lo impide su amor, sino el compromiso, y entonces, sin duda alguna, hemos perdido el camino. Las cosas dejan de hacerse por gusto, por amor, para hacerse por compromiso. Y no, no se trata de ser 'pro-Tom' o 'pro-Summer'. Porque así como él busca la certeza en un título, ella escuda sus dudas en la ausencia de éste.

“We are just friends.”


La ausencia de compromiso no vuelve 'nada' a 2 personas, no las vuelve 'sólo amigos'. Las cosas que vives con tu persona son las que le dan un lugar, y no el modo en que le etiquetes. Amar es compartir, disfrutar, reír y llorar juntos. Es dejar entrar al otro en nuestro mundo, regalarle un pedacito de éste, uno único y especial que nunca antes hemos obsequiado. Es compartir aquello que guardamos dentro de nosotros a alguien más. Y no, no se trata de ser un libro abierto y contar tooodo lo que nos pasa. Se trata de confiar, de dejar entrar a ese alguien a nuestro mundo y hacerlo parte de éste. Compartir las similitudes, y también las diferencias:

"Just because she likes the same bizzaro crap you do doesn't mean she's your soul mate."


Muy cierto. Aunque el lograr empatar 2 mundos tan ajenos entre sí en un instante fugaz de mimetismo, es parte de la magia que envuelve el conocer a alguien y, por ese momento, ver 2 almas reflejadas como si pudieran ser una misma.

Pero ser partícipe de un intercambio de mundos no es cosa fácil. Y es que hay que atreverse a echar la moneda al aire, lo cual resulta bastante complicado y arriesgado si tomamos en cuenta los ya mencionados altos niveles de incertidumbre con que se vive diariamente. Porque tememos despertar un día y sentirnos distintos. Tememos romper un corazón, o que rompan el nuestro. Oh sí, ¡cómo lo tememos! (sobre todo si conocemos el doloroso proceso que se vive después de ello). Despertar y sentirse distinto puede resultar terrible. Porque es probable que si decides dejar, debas alejarte de esa persona con la que has compartido grandes momentos. Perderle. O, desde la otra cara de la moneda (la abordada en la película), porque cabe la posibilidad de que la persona a la que amas decida dejarte y rompa tu corazón. Quizá tus expectativas no coincidan con la realidad. El mundo no siempre marcha como nos gustaría, y pasa lo que siempre pasa: La vida. Y entonces quedas en un estado zombie, deseas no levantarte, y maldices al amor y a todo lo que éste conlleva, incluyendo a la otra persona.

“I hate summer.”


Pero después de un tiempo, descubres que entre certezas e incertidumbres, nunca se sabe, excepto cuando lo sabes.

“I woke up one morning and I just knew.”


Quién sabe si sea casualidad o destino, pero el amor nos lleva por nuevos caminos, y quizá, sólo quizá, nos decidamos a apostar una vez más. Y, quién sabe, tal vez en esta ocasión la certeza nos alcance y permanezca. Quizá ésta sea LA persona. Y entonces, después de un largo camino recorrido, al fin podremos decir: Te encontré.


Links

Twitter!

Blog de Fome

Blog de Mario

Diseño del blog!


About me!


Mi mejor amigo es una estrella de mar :) no como pollo, no confundo "cita favorita" con "salida favorita", duermo mucho, como poco, canto feo pero con sentimiento xD me gusta la lluvia y brincar en los charquitos, pienso que las crayolas son mágicas y ya! shalala~ saludos a todos! :)